artículo escrito por: Carla de Cruylles, fundadora de Con fio, febrero 2021
Hace poco más de un año llegaba a mis manos un extraordinario libro que cambiaría totalmente y de forma muy sencilla la manera como me comunicaba con mis hijos y mi familia. En su día proclamé mi hallazgo por todas partes: Cómo hablar para que los niños escuchen y cómo escuchar para que los niños hablen, de Adele Faber y Elaine Mazlish. Más tarde descubrí que además de esta obra, listada en New York Time Bestsellers desde hace 33 años, habían escrito unos cuantos libros más, entre ellos destaco: Hermanos no rivales, todos reposando sobre una teoría muy profunda y una práctica extremadamente clara y eficaz. Hoy, habiéndome formado para ello me enorgullezco de ser facilitadora y poder enseñar a través de unos talleres grupales este método a padres, cuidadores y todo aquel que lo desee.
¿Quiénes son Adele Faber y Elaine Mazlish?
Adele Faber y Elaine Mazlish son dos expertas en comunicación familiar, una maestra y otra actora, ambas madres de 3 niños, asistieron durante 10 años a un grupo de padres apoyado por el psicólogo y pedagogo Dr. Haim Ginott, quien les guiaba y orientaba a seguir una educación respetuosa y no violenta. Su método se apoya en los principios humanistas. Uno de sus puntos de vista está basado en el hecho que:
«todos los sentimientos son aceptables pero no todos los comportamientos.» Dr. Haim Ginott
«todos los sentimientos son aceptables pero no todos los comportamientos.» Dr. Haim GinottSegún su enseñanza, no existe un padre o madre mejor o peor, malo o bueno, pues sus intenciones tienen como punto de partida el amor hacia los hijos. Acaso alguien se levanta por la mañana pensando «hoy voy a gritar y enfadarme con mis hijos«…y sin embargo la mañana empieza, todo se tuerce y te puedes encontrar en pocos minutos lanzando improperios a tu familia o lo que es peor, recibiéndolos. El problema reside en el desajuste que existe entre el mensaje que queremos transmitir a nuestros hijos y el que reciben. Todos tenemos buenas intenciones pero nos faltan herramientas, habilidades que nos permitan transmitir el mensaje de la manera como queremos que sea recibido.
Ginott decía: «Como padre y madre, estás en la primera línea de fuego 7 días de la semana. No necesitas más amor. Lo que realmente necesitas son habilidades.»
Con el método Faber y Mazlish se enseña una comunicación más efectiva y comprensiva que atiende a la expresión de tus sentimientos y que pone la escucha atenta en tus necesidades, así como en las de los niños y adolescentes.
Talleres grupales
Para que comprendamos e integremos estas nuevas habilidades y herramientas, así como la teoría psicológica que hay detrás, las autoras desarrollaron hace más de 40 años el método y programa de talleres grupales: Cómo hablar a tus hijos que tiene el elogio y reconocimiento entusiasta de los profesionales y los padres y madres en todo el mundo. Además su metodología está avalada científicamente y publicada el 2 de Agosto de 2018, por el departamento de Psicología de la Universidad de Montreal que reconoce la efectividad del método en la salud mental de los niños y adolescentes.
Las habilidades que se enseñan en estos talleres les dan a los adultos el conocimiento que necesitan para crear relaciones con sus hijos menos estresantes y mucho más gratificantes, tengan éstos la edad que tengan.
Resultados
A través de 30 habilidades de comunicación, se aprenden maneras muy innovadoras de resolver problemas muy comunes como:
Acompañar los sentimientos desagradables de tus hijos (la frustración, la decepción, la rabia) y expresar tu enfado sin dañar.
Conseguir la colaboración voluntaria de tus hijos sin imposiciones ni órdenes.
Expresar tus límites personales de una manera firme y aún así mostrar respeto y mantener intacta la dignidad de los niños y adolescentes.
Reemplazar el castigo.
Fomentar las conexiones positivas entre sus hijos.
Resolver tus conflictos familiares pacíficamente. (rabietas, discusiones, enfrentamientos, conductas que no te gustan)
Enseñar a tus hijos a relacionarse con los otros de manera respetuosa.
Aumento de la autoconfianza en los niños y adolescentes.
Crear relaciones estrechas y llenas de confianza recíproca.
Gestionar las peleas entre hermanos.
Minimizar las burlas y comparaciones entre hermanos.
Se integran más de 35 Habilidades de Comunicación con las que uno mismo puede darle la vuelta al ambiente que se vive en su familia.
Los 6 temas que se abordan en los 6 talleres de: Cómo hablar con tus hijos:
· Aceptar los sentimientos de tus hijos
· Fomentar la cooperación
· Alternativas al castigo y resolución de problemas
· Fomentar la autonomía
· Alabanzas y autoestima
· Ayudar a los niños a deshacerse de los roles impuestos
Los 6 temas que se abordan en los 6 talleres de: Hermanos sin rivalidad:
· Sentimientos dolorosos entre hermanos
· Cada hijo es una persona distinta: cómo tratar la comparación, igualdad y equidad.
· Roles que desempeña cada niño en su familia
· Cuando los niños se pelean
· Resolver problemas
A veces, deseamos tanto la felicidad de nuestros hijos que tendemos a querer evitarles muchas experiencias importantes para su madurez asociadas a sentimientos negativos como la frustración, la decepción y el duelo.
Gráfico del libro: cómo hablar para que los niños escuchen, de Adele Faber y Elaine Mazlish
Si el niño pierde su perro, le diremos: «no llores, no te preocupes, te compraremos otro!» Aunque lo que le podría ayudar más sería decir: «lo echas de menos, es difícil para ti, tienes la impresión que tu corazón va a explotar, lo se!»
Cuando un niño se hace un corte, aplicamos mercromina, le ponemos una tirita y sabemos que el tiempo se ocupará de cicatrizar la herida. Para las heridas del alma, solemos hacer lo mismo: «medicina» para evitar el dolor y tapar para favorecer el olvido. Si en vez de eso les escuchamos, les aportamos las primeras «curas» emocionales y permitimos que el proceso de curación se ponga en marcha.
Aceptando los sentimientos de nuestros hijos les enseñamos a confiar en sus propias percepciones. Y esto puede ayudarles a aprender a cuidar de sí mismos y a respetar sus sentimientos.
Animo a todo aquel que crea importante la responsabilidad que conlleva el cuidado y la comunicación con niños y adolescentes a descubrir los talleres: Cómo hablar con tus hijos y espero que como a mi os haga conectar mejor con vuestros hijos, mejorar la visión que tenéis sobre vosotros mismos como padres o cuidadores y tener más paz y armonía en vuestros hogares.
